miércoles, 8 de noviembre de 2006

CuentaCuentos nº 1 "Las cálidas alas de un ángel"

Las alas de un ángel

    "Las cálidas alas de un ángel acariciaban mi rostro - pensó. Fue una visión tan hermosa... Entonces volvió en si. Estaba frente a la ventana, viendo la lluvia caer, con el corazón hecho un nudo. Recordó que esa misma mañana había ido a trabajar, como tantos otros días en los que la lluvia azotaba la ciudad. La gente corría bajo su paraguas, y algunos que habían salido sin nada con lo que resguardase de la lluvia corrían para guarecerse bajo balcones y salientes.

    Recordó que no había mucho por hacer en el trabajo, así que salió antes, y sin llamar a su novio, decidió pasar por su casa a darle una visita. Cuando llegó no llamó al timbre, cogió sus llaves y entró. Se descalzó para no hacer ruido y se acercó a su habitación. Estaba muy ilusionada pensando en darle una sorpresa, pero todo se desvaneció cuando, al entrar en la habitación, le vio en la cama con otra. Las lágrimas se asomaron en sus ojos. Salió corriendo de allí.

    No sabía a dónde ir. La lluvia le calaba la ropa, pues con las prisas, se había dejado el paraguas en su piso. Cuando se quiso dar cuenta estaba en la puerta de su casa, y entró justo cuando el teléfono comenzaba a sonar. No quería cogerlo. No quería hablar con nadie en ese momento. Saltó el contestador. Era él, y dejó un mensaje.

    - Cariño, he visto tu paraguas aquí, y también tus zapatos. No sé que es lo que habrás visto para salir corriendo, pero te juro que todo tiene una explicación. Llámame.

    Estaba frente a la ventana, mojada, y con los pies descalzos. Hasta ese momento ni se había dado cuenta de que también sus zapatos se quedaron atrás. Y así pasó varias horas hasta que se decidió a llamarle. No estaba y saltó el contestador.

    - Lo que he visto no tiene más explicación que la obvia. No me llames porque no estaré aquí. Y esta es la última vez que oyes mi voz. Adiós.

    Se encaminó al baño. Llenó la bañera y cogió su toalla. También colocó lo que acababa de coger al lado de la bañera... Se metió en el agua templada y se relajó. Cogió lo que tenía al lado de la bañera, se lo acercó a la muñeca y un río de color púrpura empezó a recorrer su brazo...

    Poco a poco el sopor la transportó a su último sueño. Las cálidas alas de un ángel acariciaron su rostro... y entonces recordó que estaba muerta..."

    *Frase de Dark_Angel.

1 comentario:

  1. Los comentarios de la entrada original:

    10 respuestas a Las alas de un angel…
    Unknown dijo:
    8 noviembre, 2006 en 18:47
    Hola Alejandra!!Me alegra mucho que te hayas unido al Cuentacuentos y además justo la semana en que está mi frase como fuente de inspiración.Me ha gustado mucho tu historia… muy triste, la verdad, pero ese final me ha parecido extremadamente hermoso. No debe ser tan malo morir si un ángel te espera al otro lado de la puerta… no estaría mal vivir teniendo esa idea en la cabeza; de hecho yo muchas veces la tengo.De nada por el momento de inspiración ;) Gracias a tí por hacerme sentir orgullosa de pertenecer al Cuentacuentos y de permitirme leer esto tan hermoso. Espero seguir leyéndote más semanas.Besillos desde mi mundo.P.D: Me gusta tu space, jeje, que lo he estado mirando un poco por encima. Ahora seguiré ^^

    Señor de las Historias dijo:
    8 noviembre, 2006 en 23:32
    ya estás en la lista para que todos puedan pasar a leerte. Me alegra mucho que hayas decidido unirte a nuestra aventura, en cuentacuentos encontrarás una sección llamada "importante: normas, consejos…" dónde podrás resolver todas tsu dudas, pero si tienes más…no dudes en preguntar, que para eso estoy!
    Bienvenida!!!!

    Carmen María dijo:
    9 noviembre, 2006 en 13:27
    alejandra es precioso tu relato.
    el final la historia en si es una maravilla. No oconociaesa facultad tuya. Esperoleerte mas amenudo. El fina :\'( es una pocholada

    miriam dijo:
    9 noviembre, 2006 en 20:52
    Hola! antes de nada bienvenida! Vaya historia! Yo no se como reaccionaría en una situación asi, pero lo que si se es que ningún tio vale más que mi vida ;)
    Muchos besos y espero seguir leyendote cada semana

    Ana dijo:
    10 noviembre, 2006 en 15:40
    Es preciosa!!! Yo no se como reaccionaría si me pasase eso, pero no creo que me hubiese suicidado
    Bienvenida, espero leerte muchas veces más!!!
    bsks

    AnA dijo:
    12 noviembre, 2006 en 0:13
    Me gusta, de verdad, y metiendome en el relato yo tampoco me habría suicidado, puede que haya tirado a la otra por la ventana o quitarle la ley de padre a el pero suicidarme, yo.. no ..Aunque es algo que roza la realidad y que no sería la priemera vez que pasase.. ojala no pasara :) Muy bonita :D Beso!

    LUC-ROC dijo:
    13 noviembre, 2006 en 1:13
    Que relato más bello. Se vive y se muere por amor y el amor es el que mata. Lo hace de una vez o poco a poco, pero es el motor del mundo y la mayor trampa y sobre todo, despierta relatos tan extraordinarios como el tuyo. Un saludo.

    Irene dijo:
    13 noviembre, 2006 en 14:46
    :)
    Me encanta

    bicos

    Elena dijo:
    14 noviembre, 2006 en 11:20
    primero bienvenida y segundo: una historia preciosa!!!espero tu proximo escrito con muchas ganas!!! cual era la explicacion que le queria dar el novio??? un final muy triste y me encanta sobre todo la ultima frase: "Las cálidas alas de un ángel acariciaron su rostro… y entonces recordó que estaba muerta…"

    Ally dijo:
    14 noviembre, 2006 en 20:06
    Jo que triste.. creo que no merece la pena quitarse la vida por nada, ni mucho menos por nadie, un relato sobrecogedor, pero bonito :)
    Saludos desde mi mundo…

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