Carta
“Como todo lo importante,
ocurriste de repente…
Sergio acababa de leer el comienzo de la carta que Marta le había dejado sobre
la mesita de noche… Al despertar ella no estaba, sólo aquella carta y su camisa
manchada de café le recordaban que ella no había sido un sueño… Marta era una
mujer de 24 años, la mujer más hermosa que había visto jamás… Salió de sus
pensamientos sobresaltado porque una mariposa de vivos colores revoloteó frente
a su cara. Estuvo a punto de matarla, pero al final abrió la ventana y la dejó
marchar… Decidió continuar con la lectura de aquella misiva…
“Como todo lo importante, ocurriste de repente. Nos cruzamos por la calle a las
7 de la mañana. Tú ibas muy deprisa por la calle, yo admirándolo todo… Tropezaste
contra mí y derramaste sobre mi ropa todo tu café caliente… La verdad es que
estaba atónita, pero al fijarme en tus ojos todo lo demás desapareció. Sé que
te llamó la atención mi comportamiento. Que no me importase lo más mínimo
aquella mancha que amenazaba con dejar una marca horrible en mi ropa, y al
final decidiste tomarte el día con calma e invitarme a desayunar contigo para
resarcirte…
Cada vez que me dedicabas una sonrisa mi corazón se aceleraba y me decía
‘Marta, tranquila, hoy es hoy, y mañana todo será igual…’, pero realmente no
podía estar tranquila. Nunca me había pasado aquello, jamás en toda mi vida
había sentido todo aquel calor en mi interior, y entonces supe que me había
enamorado de ti…
Me preguntaste si quería pasar el día contigo y no dudé en decirte que sí. Sé
que también esto te extrañó, que aceptase tan pronto la invitación de un
desconocido, pero no tenía tiempo que perder… Si quería conocer el amor, no
había tiempo que perder… Fuimos a pasear por la calle, sin rumbo fijo, hablando
de ti y de tu vida. Me dijiste que nunca habías conocido a alguien como yo, que
era diferente a las demás (y hasta ahora no sabes cuanto…).
Me invitaste a comer al sitio más hermoso al que he ido nunca. No paramos de
hablar ni un solo instante. Y cerca de los postres, tu mano rozó
intencionadamente la mía, provocando en mi cuerpo una descarga eléctrica… Te
sonreí tímidamente, no sabía qué hacer, y tu mano volvió a juntarse con la mía,
esta vez para agarrarla y no soltarla a no ser que fuese absolutamente
necesario… Nuestro camino nos llevó hasta la entrada de un cine, y en un
impulso entramos. Allí me acurruqué contra tu cuerpo. Pude sentir tu calor,
pasaste un brazo sobre mis hombros, y cuando giré mi cara para verte, tus
labios se juntaron con los míos y recibí mi primer beso.
Nunca me habían besado, y siempre te recordaré por ello… Después de que leas
esta carta no sé si querrás olvidarme, como si fuese un mal sueño, pero te
aseguro que yo siempre te recordaré… Después de aquel beso vinieron otros más.
Miles de besos y caricias que disfruté en tu compañía, y al salir del cine me
propusiste irnos a tu casa… Otra vez te dejé impactado con mi ‘por supuesto!!’
y allí nos fuimos caminando, cogidos de la mano…
En tu casa me convertí en la mujer más feliz del mundo. Tus besos y tus
caricias borraron todos mis días de sufrimiento, no pensé en ello hasta que
casi era la hora de irme… Ahora estás ahí, tumbado en la cama, durmiendo, sin
saber que te tengo que dejar… Mi alma se rompe en pedazos con cada segundo que
el reloj recorre. Me gustaría detener el tiempo, pero no puedo. Es inevitable
que me vaya, y aunque se me parte el alma, tengo que decirte adiós. No puedo
pedirte que me esperes, porque no tengo derecho a que esperes un año entero
para estar conmigo un solo día…
Tengo algo que contarte y no sé por dónde empezar… Ahora ya estarás despierto,
pensando en porqué te habré escrito esta carta. Tú no podrás verme, pero aún no
me he ido, no sé por dónde salir… Es
probable que a estas alturas ya haya pasado ante ti, y espero que no me hayas
echo nada, aunque hubiese muerto con la mayor felicidad del mundo. Espero que
hayas abierto la ventana y me dejases revolotear a tu alrededor, aunque si no
es así, no te lo reprocho…
No sé muy bien por qué motivo me ocurre esto que ahora voy a contarte… Yo
siempre he sido una mariposa. Me desarrollé como tal y así era feliz… Una noche
vi un resplandor en el bosque, justo en medio del lago. Volé hasta allí para
saciar mi curiosidad, y en cuanto la luz me rodeo por entero caí al agua sin
poder evitarlo. Intenté volar, pero no hubo forma, fue entonces cuando noté que
algo en mí había cambiado. Casi me muero ahogada, pero con mucho esfuerzo
conseguí llegar hasta la orilla. Me sentía desorientada y no sabía que hacer.
Pasé el peor día de mi vida, y exactamente a la misma hora en que caí en aquel
lago, volví a convertirme otra vez en lo que realmente soy, una mariposa.
Pensarás que estoy loca, lo sé, pero dentro de un año volveré para explicártelo
cara a cara… A ti no puedo dejarte así mi amor. A ti que me has enseñado el
verdadero significado de esta palabra, te debo algo más que una carta, porque
no quería que pensases que te había utilizado o algo así. Estoy usando mis
últimos minutos para contemplarte y terminar de escribir la carta más difícil
que jamás se podría haber escrito… Siempre te querré y no te olvidaré jamás.
Hasta dentro de un año mi amor…”
En aquel momento Sergio corrió hasta la ventana, y allí, en el alfeizar
encontró a la mariposa. Quieta inmóvil, como si le estuviese observando… Pensó
que era una locura lo que estaba pensando, pero se apartó de la ventana y la
invitó a entrar. La mariposa comenzó a revolotear por la habitación y terminó
posándose sobre la camisa de Marta.
Sergio comenzó a convivir con aquella mariposa volando por su casa. No permitía
que nadie la intentase tocar, y sólo vivía para volver a casa del trabajo y
pasar sus horas junto a ella, viendo la televisión o leyendo y con la mariposa
cerca de él… Pasó un año casi sin darse cuenta y aquella mañana estaba
expectante… Se había arreglado como para una boda, y estaba en el salón,
viéndola, sin apartar los ojos de ella. De repente una luz se hizo en su salón
y por arte de magia Marta apareció ante él, desnuda, temblorosa y con una
mirada atemorizada en los ojos…
-Yo… - intentó decir.
Pero sus palabras fueron calladas por un beso. Y tras ese beso los ojos de
Sergio se unieron a los de ella y le dijo.
-No hacen falta explicaciones. Sólo tenemos un día de paraíso para recordarlo
durante el resto del año hasta que te vuelva a tener. No necesito nada más que
tu cariño hoy, sólo eso para ser feliz un año más…
Y así fue como vivió Sergio su vida de ahí en adelante. Sus amigos le llamaban
‘El loco de las mariposas’, pero ellos no sabían que aquella pequeña mariposa
multicolor que tanto protegía, era la mujer de su vida, la única… Marta…”
*Frase de Popi.
Comentarios de la entrada original:
ResponderEliminarSara dijo:
23 abril, 2007 en 19:59
q lindo!! =) bueno, se ha enamorado de una mariposa… hay quién se enamora de una rana… y nadie dice nada… :p
jeje, te quedó muy bonito!!
besoss
luzdeluna dijo:
24 abril, 2007 en 17:36
¡QUE BONITO!. HAY COSAS PEORES QUE ENAMORARSE DE UNA MARIPOSA……YO UN DÍA ME ENAMORÉ DE UN COLIBRÍ Y CONSEGUÍ SUPERARLO. ADEMÁS ES PEOR ENAMORARSE DE UN PRINCIPE QUE LUEGO TE SALGA RANA ¿NO?.
SALU2.
miriam dijo:
24 abril, 2007 en 18:58
Jo que bonita te ha quedado Niobiña!! Estoy sensible hoy jeje, yo creo que vivir ese paraiso merece la espera, pero un año… puf! es mucho no?? Ays jeje, te ha quedado una historia preciosa, me he puesto ñoña y todo jeje
Un besito!
wannea dijo:
24 abril, 2007 en 19:26
Buaaaaaaa!!!!!!! "No necesito nada más que tu cariño hoy, sólo eso para ser feliz una año más" que bonito niña, quien fuera esa mariposa para tener la oportunidad de conocer a alguien como él, ains, de verdad, muy bonita, me ha llegado al alma, muchos bessos wapa
LUC-ROC dijo:
24 abril, 2007 en 20:40
Una mariposa, el recuerdo, sueños….. El amor es bonito cuando está alimentado por nuestra propia fantasía.Me ha gustado mucho tu relato y la metáfora que guardas en él.Besos.
Queralt. dijo:
24 abril, 2007 en 23:39
Esto sí que es un cuento en todo regla. ¡Ya lo creo que sí!
Me encanta la fantasia, la magia, los misterios, todo irracional y sorprendente…
Una buena historia.
Y una leyenda preciosa la del orígen de tu sobrenombre. Me ha gustado también mucho.
Cerezas y besos.
Queralt.
Pedro Escudero dijo:
26 abril, 2007 en 8:05
¡El loco de las mariposas! Quien fuera loco para tener esa felicidad…Has escrito un cuento muy bonito y enternecedor, merece la pena el paseo por tu blog.Un abrazo,Pedro.
Noemí dijo:
26 abril, 2007 en 15:43
Es un amor distinto eso si, pero porque no? A mi me parece original!!
Irati dijo:
26 abril, 2007 en 20:17
Un año y un día… tiene que ser muy difícil… quizá demasiado.
Yo desde luego no estoy segura de poder aguntarlo, pero cuando hay amor, hay amor.
Un besito de fresa!
Unknown dijo:
27 abril, 2007 en 2:06
"No necesito nada más que tu cariño hoy, sólo eso para ser feliz un año más…". Esta frase me parece un broche perfecto para un relato tan tannn tannn bonito!!! Me ha encantado, de verdad!! Es que eso es el amor, que te baste un sólo día, un sólo minuto con la persona a la que amas para ser feliz el resto del tiempo. Y él se enamoró de una mariposa y todos cuando nos enamoramos, las tenemos en el estómago… sea como sea, cuando hay amor hay mariposas!!!
Un besote artista!
María dijo:
27 abril, 2007 en 2:06
Y si lo que nos acabas de contar no es amor… ¿qué lo es? Me ha parecido realmente preciosa y muy tierna. Casi se me escapa una lagrimilla al leerla, pero me he contenido… jejejeje ;)
¿Ves como no me la iba a perder? ñañañañaña y menos mal, porque para mi gusto personal, es lo más bonito que te he leído…
Aunque… siguen pasándome cosas raras con tu blog, ya te lo "enseñaré" ;P
Mil besos y mil aplausos nena. Los besos todos de piña, que no me quiero quedar con ninguno!
P.D. Y que sepas que esta tarde has terminado de "ganarme" por completo ;)
Hasta mañanaaaaaaa!!
Unknown dijo:
27 abril, 2007 en 2:09
Aisssss que me confundí de dirección de msn jajaja perdón, el niño rockero soy yo :P
Cristina dijo:
ResponderEliminar27 abril, 2007 en 20:36
Ohhhhhh qué historia más bonita!!!!
Y yo que pensaba que la tía estaba enferma y se iba a morir o algo jajaja (qué negativa soy eh??) pero tu historia me gusta mucho más, que conste :P
Besos!!!
Asiria dijo:
28 abril, 2007 en 16:35
Casi una semana he tardado en llegar pero no sabía que resultase tan dificil dar el primer paso para salir de esta maldito bloqueo cuyas causas aún desconozco. Pero que es el tiempo tras leer tu maravilloso relato? El instante mas pequeño puede resultar el mas eterno, tú eres eterna, ni la tristeza podrá arrebatarte tantos y tantos momentos de felicidad que te aguardan, que mereces.
Es la historia mas linda que le han dedicado nunca. Te envía un millón de besitos y, como dice ella, muchas no, todas las gracias!
Un abrazo enorme!! Sé que sales adelante!! Creo en las hadas!