lunes, 29 de mayo de 2017

Iniciativa Adopta una Autora 3: Neïra

Continuamos con la Iniciativa Adopta Una Autora y como es costumbre voy a contaros algo más de Neïra. Esta vez quiero aprovechar que está por llegar la salida de su próxima novela, así que abusando de confianza, os traigo algunos detalles:

Título: Caótica Jimena.
Fecha de publicación: 21 de junio.
Sinopsis: Jimena tiene un plan: vivir tranquila sin salir demasiado de su zona segura, conseguir un trabajo relacionado con sus estudios y no implicarse con nadie a un nivel que no sea puramente físico.
El orden, la racionalidad, la dureza.
Bruno no tiene ninguno, más que ser feliz con los pequeños placeres de la vida, pero sí muchos problemas que debe resolver mientras deja que sus pasos lo guíen.
El caos, la emotividad, la ternura.
Un piso. Un encuentro. El objetivo de una cámara. Un giro inesperado. El desequilibrio.
Y sucede.
Dos personas aparentemente opuestas que se cruzan y convergen, cuando sus caminos no lo hacen.
Porque el amor no siempre llega en el momento indicado ni con la persona adecuada, pero no por ello desaparece.
Porque, aunque la vida nos haga elegir lo que más duele, todas las historias de amor del mundo se merecen un final.

"Siento que lo nuestro sea, pero que no pueda llegar a ser."

Pregunta: Novela nueva a la vista, cuéntanos un poco, porque esta sinopsis a mí ya me deja rota...
Respuesta: Caótica Jimena es un proyecto que nunca pensé que llegaría a ser tan especial para mí. Es una novela sobre dos personas muy diferentes que se cruzan cuando menos se lo esperan y entre ellas surge ese «algo» que hace que salten chispas. Es una novela que trata sobre esas veces en las que el amor llega en el momento menos indicado, cuando no lo deseamos o cuando no podemos dejarnos llevar por él, con mucha tensión sexual e intensidad, pero también con realidad. Porque a veces la vida nos hace tomar decisiones que no son las ideales… Y no digo más, que al final lo largo todo.

P: La portada es muy colorida y diferente a las últimas. ¿A qué se debe el cambio?
R: Sinceramente, encontrar la portada ha sido un absoluto caos. Yo buscaba algo muy específico que reflejara lo que me transmite a mí la historia, pero eso es más complicado de lo que parece de entrada. Al final, decidí decantarme por la imagen que más me cuadraba con Jimena, un personaje que vive un poco escondido y que gracias a otra persona comienza a mirar el mundo que le rodea con otros ojos, con un visor diferente.

P: Además te la ha hecho otra conocida autora, Alice Kellen. ¿Cómo ha sido poneros de acuerdo?
R: Muy fácil, como todo con ella. Tengo la suerte de haberme cruzado en el camino con personas increíbles que me apoyan a cada paso que doy y que me echan una mano siempre que lo necesito, entre ellas Alice.
La idea surgió cuando empecé a buscar imágenes; ella ya había leído la historia, así que sabía lo que quería y se unió en la búsqueda. Cuando quisimos darnos cuenta, ya me había hecho una portada que me encantaba y dijimos, ¿por qué no?

P: Hasta ahora tus personajes han tenido personalidades muy dispares: Oliva era divertida, Daniela más reflexiva, Sara la ternura personificada... ¿Y Jimena? ¿Qué podemos esperar de ella?
R: Jimena es una chica complicada. Aparenta tener muy claras sus prioridades y sus objetivos en la vida, pero en realidad está muy perdida. Es pragmática, responsable, algo fría y reservada, pero en el fondo esconde mucho más de ella de lo que muestra. Es un personaje al que he cogido muchísimo cariño, porque la he comprendido desde el minuto cero y ha sido el femenino más complejo que he creado hasta la fecha. Y no sé qué tienen los personajes difíciles, que se nos quedan muy dentro.

P: ¿Y qué puedes contarnos del protagonista masculino?
R: Ay, Bruno… lo adoro. Ha sido un placer meterme en su cabeza, porque está vez los dos son narradores al mismo nivel. Bruno es todo lo opuesto a Jimena, una persona que vive su vida al día, dejándose llevar por lo que siente, disfrutando de las pequeñas cosas. Es un niño grande, aunque también esconde una parte adulta que espero que os enamore tanto como a mí.

P: Pregunta obligada, ¿nuevos proyectos a la vista?
R: Sí, 1583. Proyecto arriba, proyecto abajo. Ahora en serio…
Por un lado, tengo 2018 cerrado con dos novelas, una terminada y otra a medio escribir, ambas de romántica contemporánea. Aún no puedo contar nada, pero tengo la corazonada de que va a ser un año muy especial para mí.
Y por otro lado, estoy comenzando a escribir la historia de uno de los secundarios de Jimena. No he lanzado esta novela como una serie, pero sí os confieso que quizá con el tiempo lo acabe siendo. Eso sí, no quiero ni presión ni límites de tiempo, porque no sé funcionar así, por lo que os pido paciencia y, si tiene que llegar, llegará.

P: Hace poco has hecho pública la noticia de que vas a asistir a tu primera Feria del Libro en Madrid. ¿Nos invitas?
R: ¡Por supuesto! Es algo muy emocionante para mí, y no solo como escritora, sino también como lectora, porque va a ser mi primera vez. Voy a asistir con Saray García y Abril Camino. No sé si sabéis que no permiten la participación de escritores autopublicados, por ese motivo no firmamos en ninguna caseta ni lugar concreto, pero el campo es libre, así que esteremos por allí el sábado 3 de junio de 6 a 8 de la tarde (en los alrededores de la caseta 272) y charlaremos con todo aquel que quiera conocernos. ¡Ojalá pueda poneros cara a muchas de vosotras!
Las que estéis cerca, no dejéis pasar la oportunidad

P: ¿Y algún regalo para los lectores? Para que vayan matando el gusanillo...
R: ¡Claro! Antes de irme y dejaros con este fragmento de Caótica Jimena, quiero darte las gracias a ti, Jan, por tu apoyo constante y por adoptarme para esta iniciativa tan bonita. Y a todas las que me leéis y que me acompañáis cada día, GRACIAS por estar ahí y por querer ya a Jimena, incluso sin conocerla.
Espero que esto os sirva para abrir boca…

Os presento a Jimena a través de los ojos de Bruno ;)

« … Yo no le gustaba a Jimena, me atrevería a decir que hasta le desagradaba mi forma de ser, de reírme todo el tiempo, pese a estar jodido, de preguntarle por su vida sin controlar las normas sociales que nos dicen que no debemos preguntar cosas demasiado íntimas cuando no tienes el suficiente grado de confianza, de estar medio tumbado a su lado cuando apenas nos conocíamos, descalzo, como si me encontrase cómodo ante cualquier circunstancia.
Y es que, por lo general, lo estaba.
No comprendía a las personas como Jimena, que parecían vivir cohibidas, atadas a algo que en realidad no existía, poniéndose obstáculos a sí mismas, encerradas de algún modo.
¿Qué había de divertido en eso? ¿De estimulante? Nada.
Vivir no podía resumirse en eso; vivir era otra cosa muy distinta.
Después de su escrutinio, al que me enfrenté con mi sonrisa de flirteo más potente solo para enrabiarla, gruñó y percibí cómo su máscara caía del todo.
—¿Siempre tienes activo el modo «coqueteo»?
—¿Qué? ¡No! —Me eché a reír y ella me fulminó con la mirada cuando mi mano salió despedida de forma instintiva y le acarició el brazo, demostrándole que quizá sí que lo tenía—. O sí… No lo sé, yo… soy así. No hay más que esto que ves, nena.
Me miró de arriba abajo, alzando una ceja de forma despectiva.
Podía haberlo hecho deprisa, de la misma forma en la que te observaría una madre o una profesora cuando está decepcionada con lo que ve, pero no. Lo hizo de forma lenta, dedicando el tiempo necesario a cada parte de mí como para memorizarme, o al menos así me sentí. Como una puta rata de laboratorio que no sabe lo que le espera.
Mi pelo. Mis ojos. Mi cuello; parándose más de lo debido cuando tragué saliva con nerviosismo. Mi ropa. Mis manos. Mi torso. Hasta llegar a mis pies.
Nunca me había avergonzado tanto de tener unos pies horribles.
El silencio se masticaba, pero nunca me he sentido incómodo ante los silencios; sirven para compartir demasiadas cosas que las palabras no saben transmitir.
Ella entonces tampoco lo pareció; estaba tan ensimismada en lo que fuera que la bloqueaba que creo que no fue consciente de que la situación estaba cargada.
¿De qué? De una tensión sexual por mi parte bastante clara. Quería follarme a Jimena, no es un secreto; creo que, dadas las circunstancias, ni para ella lo era. Pero también estaba cargada de otra cosa que nunca me hubiera esperado; de algo demasiado suyo que nunca me había encontrado en alguien.
Jimena parecía estar tan perdida en su propia vida que asustaba. Como esos libros de imágenes en los que tienes que descubrir qué objeto es el que sobra de una fotografía. Un reloj digital en una imagen de la Edad Media.
Eso era Jimena.
Se observó a ella misma, con los ojos turbios por el alcohol que a todas luces no le sentaba demasiado bien, y dejó escapar unas palabras que ambos sabíamos que eran mentira.
—Yo también soy así.
—¿Estás de coña? Te escondes todo el tiempo, Jimena. Como una tortuga dentro de un caparazón. Es imposible que esto seas tú. Me niego a creerlo.
—Una tortuga —repitió; después sus labios se convirtieron en una fina línea.
Se cerró un poco en banda, pero rectifiqué rápido para no perderla de nuevo.
—Lo que veo es bueno, pero creo que escondes lo mejor.
Asintió, como si mi explicación significara más de lo que ya lo hacía.
Serví más vino y ella no se negó…».

Caótica Jimena, Neïra.


Por mi parte añadir que estoy muriendo de ganas de embarcarme en esta nueva historia, y decirte Andrea, que no tienes nada que agradecer. Sé que harías por mí lo mismo, y eso ya es suficiente.

2 comentarios:

  1. Hola!
    Ay, qué ganas más grandes!! Me ha encantado saber un poquito má sy ese fragmento, ay!! El saber que ya está escribiendo de los secundarios de Jimena es genial!! A mí eso me encanta :)
    Gracias por la entrevista compi de proyecto!
    un beso
    S

    ResponderEliminar
  2. ¡Hola! Qué emoción!! Gracias por este pedazito, me encanta Neïra y todo lo que escribe <3

    Un beso

    ResponderEliminar

Siéntete libre de compartir tus impresiones de lo que has leído. Un Feedback nunca viene mal y siempre es bien recibido.